Qué hacer si trago una espina de pescado

Al comer pescado es muy común, al menos las primeras veces, tragarse una espina. Es un momento angustioso que, normalmente, termina en un susto y con el problema resuelto en menos de un minuto.

Pero, lejos de los mitos de comer según qué alimentos, como miga de pan, para arrastrar la espina, los expertos recomiendan mantener la calma y observar con detenimiento antes de actuar.

¿Qué hacer si se traga una espina de pescado?

Según el doctor César Roza, especialista de Urgencias de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG), es importante distinguir entre un atragantamiento o una situación que presenta dificultad respiratoria o tos, ya que en estos casos se debe buscar atención médica de urgencia.

Si el dolor de la espina se produce en las zonas bajas de la garganta, en la zona baja del cuello o en las regiones del esófago, también se debe acudir a urgencias.

En caso de que la espina se encuentre en zonas donde tengas acceso, como la boca o la lengua, puedes intentar retirarla tú mismo con unas pinzas. Sin embargo, si el dolor persiste por más de una hora, es recomendable acudir al médico.

¿Qué pasa con los mitos sobre cómo sacar una espina de pescado?

Existen varios mitos sobre cómo sacar una espina de pescado, como utilizar miga de pan, agua o aceite. Sin embargo, el doctor Roza afirma que ninguno de estos métodos va a sacar la espina de estar clavada en la garganta.

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En realidad, intentar arrastrar la espina con estos métodos podría empeorar su posición y causar más molestias. Lo más recomendable es intentar retirarla con unas pinzas si está en una zona accesible.

Tener en cuenta que, a veces, el dolor o molestia que se siente después de tragar una espina no necesariamente significa que la espina siga ahí. Puede ser causado por el propio pinchazo o una pequeña herida. Si no presentas dificultad respiratoria, tos persistente u otros síntomas graves, no es necesario preocuparse en exceso.

¿Cuándo acudir al médico?

Si el dolor o molestia persiste por más de dos horas, es recomendable acudir al centro de salud más cercano para que los profesionales te examinen y determinen si es necesario realizar algún tipo de intervención. Recuerda que es mejor prevenir cualquier complicación.